Es hora de ponerse las botas y seguir los pasos de los 12 hombres que han caminado sobre la Luna.
Cuando nos iniciamos en esto de la observación astronómica, el primer astro al que solemos apuntar nuestro instrumento, sean unos simples prismáticos o un pequeño telescopio, es la Luna. Sin duda, cualquier aficionado a la Astronomía ha pasado muchas horas observado cráteres, cadenas montañosas y otros elementos de la superficie lunar y ha quedado fascinado explorando un mundo tan diferente del nuestro.
Pero aquí y allá, entre rincones y grietas, podemos encontrar los (con toda seguridad) seis lugares más notables de la Luna: los sitios de alunizaje de las misiones Apolo. Son los únicos lugares donde la humanidad ha logrado uno de sus sueños más antiguos: Caminar por otro mundo.
Ningún telescopio en la Tierra puede ver algún objeto o marca en la Luna relacionada con los Apolo. Ni tan siquiera el Telescopio Espacial Hubble puede discernir evidencia alguna de los alunizajes. Aparte de que la intensa luz lunar reflejada podría dañar sus delicados instrumentos, las leyes de la óptica definen sus límites: El espejo de 2,4 metros de diámetro del Hubble tiene una resolución de 0,024 segundos de arco en luz ultravioleta, que se traduce en una resolución mínima de 43 metros a la distancia de la Luna. En luz visible, su resolución es todavía menor, 0,05 segundos, o algo más de 91 metros. Con diferencia, el objeto más grande que permanece en la Luna tras cada alunizaje Apolo es la etapa de descenso del Módulo Lunar, con unas dimensiones de 3,2 metros de alto por 4,22 metros de ancho. Teniendo en cuenta estas limitaciones, ver algo de los Apolo desde la Tierra es misión imposible.
Sin embargo, tenemos imágenes de esos lugares y de las huellas y objetos que dejaron los moonwalker. La sonda Lunar Reconnaissance Orbiter (Orbitador de Reconocimiento Lunar) o LRO de la NASA, puede descender de su órbita hasta 50 km de altura de la superficie lunar, lo suficientemente cerca para obtener imágenes de cada sitio de alunizaje con un detalle sin precedentes.
Seis misiones Apolo alunizaron y partieron con éxito de la Luna entre julio de 1969 y diciembre de 1972. En la imagen superior y en el sentido de las agujas del reloj: James Irwin saluda la bandera en Hadley Rill; Harrison Schmitt recolecta muestras de rocas en el valle de Taurus-Littrow; la huella de Buzz Aldrin en el regolito lunar; la foto de familia de Charlie Duke; Edgar Mitchell fotografía el desolado paisaje de las tierras altas de Fra Mauro; y Pete Conrad comprueba la estabilidad de la sonda Surveyor 3 sobre la superficie lunar.
Las imágenes orbitales de la sonda LRO nos ayudarán en nuestras excursiones visuales para localizar los sitios de las misiones Apolo. Todos los lugares de alunizaje se encuentran en la cara visible de la Luna y se eligieron para explorar diferentes terrenos geológicos. Los astronautas trajeron un total de 382 kg de rocas lunares, que representan desde basaltos de los maria hasta antiguas rocas de las tierras altas y rocas destrozadas por el impacto de meteoritos. Los astronautas del Apolo 12 incluso encontraron el primer meteorito descubierto en otro mundo, la condrita carbonácea Bench Crater.
Como ya hemos dicho, resulta del todo imposible ver algo de los Apolo desde la Tierra, pero sí podemos explorar las zonas de alunizaje y ver algunos cráteres y otras características más próximas a cada lugar.
Tras la fase de Luna Nueva, la línea de avance del amanecer o terminador lunar nos irá mostrando progresivamente un sitio tras otro, comenzando con el Apolo 17 en el hemisferio este de la Luna y terminando con los Apolos 12 y 14 en el oeste. Para ver cada lugar, un telescopio de 4 pulgadas (10,16 cm) o más de 75 aumentos hará el trabajo. Pero cuanto mayor sea el diámetro y mayor sea la potencia empleada, con más detalle se podrá localizar cada lugar de alunizaje y visualizar mejor la superficie lunar.
Los tiempos aproximados tras la fase de Luna Nueva, cuando cada lugar de alunizaje Apolo está completamente iluminado por el Sol son:
- Apolos 17 y 11: Seis días.
- Apolo 16: Siete días o cuarto creciente.
- Apolo 15: Ocho días.
- Apolos 12 y 14: Diez días.
Las siguientes imágenes son mapas para indicar con precisión cada sitio de alunizaje de las misiones Apolo. Para facilitar su localización con telescopio, el sur está arriba, y el hacer clic en las imágenes vinculará a versiones de mayor resolución.
Las imágenes base para todos los sitios son fotografías tomadas por la sonda LRO. Visite el sitio web ACT-REACT QuickMap, donde encontrará un mapa lunar detallado, con zoom y otras muchas características. Para su utilización, haga clic en el icono «Layers» (arriba a la izquierda), elija «Overlays» y desmarque la opción «Sunlit Region» para ver una Luna completamente iluminada, sin importar la fase actual. Al marcar la casilla «Nomenclature» aparecerán los nombres de los cráteres y muchos otros accidentes y elementos de la superficie lunar. Más detalles sobre cada una de las imágenes LRO-Apolo se pueden encontrar aquí.
Apolo 11
El Apolo 11 alunizó el 20 de julio de 1969 en el terreno relativamente suave y seguro del Mare Tranquillitatis. Se pueden ver los tres cráteres nombrados en honor a la tripulación del Apolo 11, justo al norte del lugar de aterrizaje: Armstrong (4,6 km de diámetro), Aldrin (3,4 km) y Collins (2,4 km).
Apolo 15
James Irwin y David Scott pasaron tres días junto a Hadley Rille en las inmediaciones de los Montes Apenninus después de alunizar el Apolo 15 el 30 de julio de 1971. Esta fue la primera misión en utilizar el rover Lunar, ampliando enormemente la cantidad de terreno que los astronautas podían cubrir.
Apolo 17
Harrison Schmitt y Eugene Cernan llevaron a la última misión Apolo al valle Taurus-Littrow el 11 de diciembre de 1972. Los astronautas una vez más buscaron material antiguo de las tierras altas. Durante su exploración, rompieron un guardabarros trasero del rover lunar y lo repararon usando mapas y cinta adhesiva.